El trabajo de 230 euros al día que nadie quiere hacer.

La falta de empleo, la precariedad y los bajos salarios son un grave problema para buena parte de la población.

En Nueva Zelanda hay una oferta que muchos no rechazarían.

¿Cuál es el trabajo de tus sueños? ¿Cuánto quieres cobrar por la tarea que desempeñas cada día? ¿Qué cantidad sería la justa? ¿Estás harto de ir a la oficina a diario sin ninguna motivación y por un sueldo mísero? Tenemos un puesto para ti.
Si te gusta la naturaleza y estar en contacto con el medio ambiente, esto es perfecto para ti. Nueva Zelanda tiene un programa, bautizado como One Billion Trees Programme, con el cual pretenden plantar mil millones de árboles de aquí a 2028. Es un plan perfecto para combatir el cambio climático, uno de los principales problemas y mayores riesgos de la humanidad por tercer año consecutivo, según el Foro Económico Mundial.
Los viveros han aumentado la producción para poder responder a la demanda, pero se ha encontrado con un grave problema. No tienen quien plante esos árboles, nadie quiere ese puesto. En Isla del Norte falta gente para trabajar y ni siquiera los 400 dólares neozelandeses son suficientes para convencer a nueva mano de obra, según publica 'Stuff'

Aire puro

Cuando la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, anunció que tenía pensado la plantación de 100 millones de árboles cada año, aseguró que el número era razonable y viable. Su gobierno ha ofrecido 118 millones en subvenciones directas a los propietarios de tierras para fomentar la plantación, así como la regeneración nativa.
Aumentar la producción es una de las tareas que, según Ardern, es razonable y viable. Además, los está cumpliendo: frente a los 54 millones que que plantaron hace dos años, se calcula que se cultivarán unos 100. ¿Cuál es el principal problema? No encuentran a nadie que les ayude a echar raíces. Lo cierto es que hay incentivos y el salario no está nada mal, unos 7000 euros al mes, pero no hay gente suficiente dispuesta a hacerlo.
En la actualidad, la especie que más se está replantando es el pino de Monterrey o California. En un 90% de los casos, crece deprisa. Es un árbol de talla media a elevada, de aproximadamente 45 metros de altura. La ventaja es que es una especie de crecimiento rápido, ya que puede alcanzar un diámetro de tronco de más de 50 cm en 20 años. También eucaliptos y abetos de Douglas.
Pero parece que tiene una pequeña trampa: se cobra por árbol plantado, es decir, cuantos más consigas, más dinero ganas (se calcula que el máximo diario son unos 236 euros). "La tasa para la siembra en la Isla del Norte, donde parece que está localizado el problema, es de unos 60 centavos por unidad. Aun así no podemos conseguir gente. El mayor impedimento es encontrar la mano de obra para plantar. Podemos mecanizar gran parte del trabajo, pero no a una persona con una pala”, lamenta David Janett, director de Forest Management.
Además de la reforestación, el plan de la primera ministra incluye otras medidas como lograr un abastecimiento energético 100% renovable y convertirse en uno de los primeros países que logre alcanzar las cero emisiones de carbono. ¿Su meta? Conseguirlo en 2050.

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Al final, no se contenta el que no quiere,
pero como en casi todo,
siempre hay que leer la letra pequeña.