Un paciente le asesta un corte en un costado a un Vigilante de Seguridad del Hula.

Otro miembro de seguridad sufrió una herida en un ojo cuando intentaba reducir al enfermo en la unidad de Psiquiatría.

La del miércoles al jueves fue una madrugada movida en la unidad de Psiquiatría del Hula. Un paciente hirió a dos vigilantes que acudieron a su habitación a reducirlo porque estaba muy alterado. Esta agresión no fue un episodio puntual. Se repite con relativa frecuencia, según denuncia el personal de seguridad privada de este centro sanitario.

A medianoche un paciente que estaba ingresado en Psiquiatría arrancó una barra metálica de su cama y reventó el cristal blindado de la puerta de su habitación. Fue requerida entonces la presencia del personal de seguridad privada. Acudieron tres vigilantes.

Una de las esquirlas alcanzó en un ojo a uno de los vigilantes y el enfermo le asestó un corte en un costado a otro con uno de los cristales que se desprendió de la puerta cuando lo fracturó.

El personal actuó también porque temía que este paciente, dado el estado de alteración que presentaba, pudiese agredir al enfermo con el que compartía habitación, que en todo momento permaneció en su cama.

Los vigilantes consiguieron reducir al paciente e inmovilizarlo en el suelo, mientras el personal sanitario le administraba un sedante. Después lo acostaron y ataron a la cama.

Los dos heridos recibieron asistencia médica en el servicio de Urgencias del Hula, uno de ellos, el que recibió el corte en el costado, se encuentra de baja.

Este episodio violento, según denunciaba este jueves el secretario general de la unión comarcal de CC.OO. en Lugo, Manuel Quiñoá, pone de manifiesto la falta de medidas de seguridad y de personal. Considera que si dispusiesen de chalecos antitrauma y antipinchazos uno de los vigilantes no hubiese resultado herido este jueves.

Manuel Quiñoá recordó el apuñalamiento que sufrió un vigilante en el Hula en febrero de 2020 por parte del acompañante de un paciente.

En este centro sanitario prestan actualmente servicio siete vigilantes en el turno de mañana, seis en el de tarde y cuatro en el de noche, si bien, en cada tanda, uno de ellos debe permanecer constantemente en el centro operativo de seguridad.

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Grano a grano, se levanta la montaña.

Pronta recuperación deseamos a los Vigilantes de Seguridad.

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Grano a grano, se levanta la montaña.

Por otra parte, para Intervenciones de este calibre, es necesario dotar al servicio de material antidisturbios, porque en Unidades de Psiquiatría o en Urgencias, cuando se requiere la Intervención del personal de seguridad, no suele ser para felicitar las pascuas, y normalmente ya hay que enfrentar las situaciones en inferioridad numérica, para que a mayores la protección propia del personal de seguridad, no sea la adecuada a las circunstancias.
Cascos, escudos, chalecos y guantes anticorte, y gel de pimienta,  deberían empezar a dotar al personal de seguridad que por necesidades del servicio, tuviese que Intervenir en dichas situaciones.

El actual "buenísmo" y las cuestiones de "imagen" que suelen argumentar las gerencias de dichos centros, para no equipar adecuadamente a quienes están encargados de la Protección Personal General de quienes se encuentren dentro de un Centro Sanitario, no deberia ser la prioridad ante cuestiones de seguridad y protección personal laboral.

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Grano a grano, se levanta la montaña.

UGT ha denunciado la agresión a dos vigilantes de seguridad en el Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo (HULA) y pide material de protección como la entrega de chalecos anticorte.

En un comunicado, afirma que los llevan reclamando "desde hace años" después de que otro trabajador "sufriese varias heridas por arma blanca que lo inhabilitaron para ejercer sus funciones durante más de 18 meses".

"No hay semana en la que los servicios sanitarios no requieran la presencia del personal de seguridad, sobre todo en urgencias y la unidad de psiquiatría". "En ocasiones los vigilantes sufren agresiones verbales pero otras veces estas son físicas, como sucedió en este caso", apunta.

En concreto, explica que los dos vigilantes de seguridad fueron agredidos cuando comparecieron en la unidad de psiquiatría requeridos por el personal sanitario para inmovilizar a un paciente que se encontraba fuera de control.

"El enfermo golpeó con mobiliario de la habitación un cristal laminado y con un trozo del cristal hirió al vigilante en un costado, por el cual actualmente se encuentra de baja". "El otro vigilante sufrió heridas en un ojo al saltarle una esquirla del cristal", especifica.

UGT denuncia que la empresa adjudicataria del servicio "se niega a facilitar los chalecos anticorte hasta que una sentencia los obligue" y denuncia la "desprotección" de los trabajadores.

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Grano a grano, se levanta la montaña.

En principio esperemos que no sea nada serio lo de los compañeros .

Y en segundo lugar ¿ El porqué ? de hacer estas notas los sindicatos en vez de luchar por qué los Vigilantes de Seguridad , tengan una dotación como Dios manda .